Reflexiones │ La diversificación de las fuentes de financiamiento es un tema que cada vez acapara mayor atención entre las organizaciones dedicadas a la investigación, sean universidades, ONG’s o think tanks.

La diversificación no sólo ayuda a la sostenibilidad a través del tiempo (y especialmente a las metas) de una organización, sino también a su independencia (por ejemplo, al momento de definir la agenda de investigación).

Históricamente, la filantropía y el sector privado han provisto grandes sumas de dinero con miras a mejorar la vida de las personas. Además, los individuos y las empresas siembre han intentado influenciar la agenda social y política. Al tiempo que la ayuda al desarrollo busca nuevos modelos de financiamiento, el sector privado es visto como protagonista en el escenario de las políticas de investigación (ver Think net Topic guide).

Los beneficios de apoyar con financiamiento la investigación no son tan medibles como los proyectos de financiamiento con una base territorial, y requieren una visión de largo plazo. Entonces, ¿cuáles son las razones y motivaciones para que los donantes del sector privado financien la investigación? Varían, inevitablemente: algunas empresas buscan legitimar y mejorar su perfil entre sus clientes a través del trabajo en proyectos sin fines de lucro, otros apuntan a adquirir conocimiento con miras a mejorar sus iniciativas sociales, y otros sólo quieren encontrar una organización “neutral” que le ayude a introducir determinadas ideas en el debate político.

Por otro lado, las organizaciones de investigación cada vez buscan más (o al menos aceptan) financiamiento del sector privado. Esta decisión se sostiene en varias razones: la necesidad de diversificar sus fuentes de financiamiento para ganar independencia y asegurar la sostenibilidad de su trabajo (especialmente en regiones en donde la ayuda externa y/o el Estado no apoyan la investigación); además, el sector privado se ocupa de cuestiones que los gobiernos prefieren evitar. También existe la realidad de que las compañías multinacionales son, en determinados lugares, más poderosas que el Estado mismo.

Más allá de que en algunos países en vías de desarrollo la relación debe fortalecerse, lo que parece claro es que el sector privado y los filántropos pueden jugar un papel clave en el apoyo de la investigación orientada a las políticas. ¿Cuáles son las oportunidades y desafíos para las organizaciones de investigación a la hora de trabajar con el sector privado?

Además de asegurar la sostenibilidad y la independencia a través de nuevas fuentes de financiamiento y de trabajar en temas en los cuales la ayuda externa y los gobiernos no están interesados en llevar adelante, el interesar a las empresas nacionales en apoyar proyectos locales puede ayudar a que las organizaciones de investigación solucionen problemas de importancia nacional (lo que es menos probable en el caso de organizaciones que dependen del financiamiento externo).

Trabajar con el sector privado también conlleva desafíos: la independencia y la reputación son el talón de Aquiles. Los fondos privados, sean de individuos o de corporaciones, son sensibles para muchas organizaciones de investigación dado que su imagen apartidaria puede verse dañada. Siguiendo a Mendizábal, la financiación del sector privado no está libre de las críticas de partidismo, dado que este (en particular en los países en desarrollo) a menudo ejerce influencia entre las autoridades debido a las fronteras porosas entre los dos. Esto crea dudas sobre la independencia de la investigación que financian.

Hay muchas estrategias que pueden ser efectivas a la hora de buscar apoyo del sector privado (crear consejos consultivos con miembros sector privado para la organización, organizar desayunos o reuniones con compañías para presentar el trabajo de la institución en un área de particular interés), pero un evento de recaudación de fondos puede ser una excelente idea para reunir a toda la comunidad de emprendedores privados y empresas para de ese modo hacer más visible a la institución.

Por Leandro Echt, Coordinador del Programa de Incidencia, Monitoreo y Evaluación de CIPPEC, y María Laffaire, responsable de donantes individuales en la Dirección de Desarrollo Institucional de CIPPEC e Inés Lanz, Directora de Comunicación de Fundación Vida Silvestre Argentina.

Para conocer algunas ideas sobre cómo llevar adelante un evento de recaudación de fondos, vea la segunda parte de este artículo.

Este artíiculo también está disponible en inglés.

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